martes, 20 de enero de 2015

– ¡De peras brotarán estrellas!

Tony Cantero Suárez
 La mejor cura que exista no sana las pesadillas del día a día, pues la medicina cual la lírica, solo calma a quien le dolía. Pero mejor que las caricias consentidas no existen ni en poesía cuartillas, ni en las clínicas aspirinas. Ay que cabeza la mía, ninguna frase es fluida pues sin cosquillas la tinta no se excita. Se riega como gelatina si me erizan, mi carne no es de gallina pero mis huevos para ninfa vivifican. La cabellera me pica, la rasco, pienso y me inspira pero la mano se quita. Porque si viene la mía, la Venus de la Colina, sin boticas…
- Se encabrita y nos subimos en la silla; y no se escribe, ni pinta, se coita. – Ay que cabeza maldita, si se me pone bravita, se estremece agradecida de ser lista y fuma en pipa…
 En este parque las peras, injertadas en los olmos dan canela. En el de al lado las velas se iluminan a los cuatro vientos bajo noches gélidas; y a la luz de las estrellas brota esperma, en la cascada de afuera. Allí donde nadie llega porque está lejos y cerca, todo depende del tema, me encontré una rosa seca petrificada en madera; y al tocarla se hizo cera, se abrió y cerró dando vueltas. Y al sentir zumbar abejas, polinizó la pradera hasta el frío delta. Y luego sin que aún la oliera, desapareció en la selva hecha tigresa, con la corola repleta.
– Ay me duele la cabeza, tengo obsesión de poemas…
 Me he hasta comprado una imprenta para publicar la gaceta de las mentiras que cuentan, las de la Grecia magnifica cuna de nuestras quimeras, la de la Roma que pintan con su Vaticano acuesta. La de Jerusalem sin cripta, sin el Mesías y sin penas en el Líbano y la Palestina. La de la Europa moderna que se envicia entre rencillas, la de los Estados Unidos de América que en vez de Imperio sea guía. Y la de la América Latina con una Cuba democrática y distinta, sin más caudillos populistas, ni guerrillas marxistas delictivas.
– Ay que cabeza insumisa, no me cansa con la rimas si se atrista, pero detesta la política por corrosiva, por envolver y hacer fintas. Por prometer que al votar tendremos dicha. Y por hacer creer que de la candela en las esquinas, de peras brotarán estrellas bendecidas.
― Cuando los olmos florezcan, en las altas cimas de la blanca estepa; y en barquillas…
– Ay que cabeza pacifica, aunque no parezca serena, con paciencia se renueva y pragmatiza; y reitera que creer más que meta es pura idea, utópica, hipotética, e inconcisa.
– Ay que cabeza si se erotiza, articula y tipifica a la Venus de la Colina, para prenderle una vela de rodillas desnudita, cuando acepte mi política, rendida sobre una silla destruida…
― Y en la cascada de afuera, de peras brotarán estrellas; y esperma de golondrinas.
.– Ay que cabeza correcta que detesta la inconsciencia, que me dibujen maleza en mi propia firma, para que vea que de la cesta que me dejan, con almendras y golosinas…
― ¡De peras brotarán estrellas, cristalizadas con su almíbar!
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