Las ambiciones del alma revitalizan las ganas y valorizan la sabia, la luz
del cuerpo se opaca cuando perdida la gracia el sol no da por la espalda;
- y al surcar los rayos calan, entre la carne y la grasa concentradas…
del cuerpo se opaca cuando perdida la gracia el sol no da por la espalda;
- y al surcar los rayos calan, entre la carne y la grasa concentradas…
Y en atardeceres, si se escapan, saldrán la piel abrazada y vuestros
huesos con escamas conformarán la muralla, donde en sombras todo
acaba; – y contemplarán del cielo caer sin mascaras las caras, sin tocarlas.
huesos con escamas conformarán la muralla, donde en sombras todo
acaba; – y contemplarán del cielo caer sin mascaras las caras, sin tocarlas.
‒ “La oscuridad no es dorada, ni la claridad tan blanca, la duda es vaga.”
La servitud es tan mala, como lo es la distancia. Las mentiras causan
ansias, la codicia las venganzas y la experiencia casi nada; – y nadie acepta
que tras de sí mengua el mañana, cuando otrora le relatan y esperanzan.
ansias, la codicia las venganzas y la experiencia casi nada; – y nadie acepta
que tras de sí mengua el mañana, cuando otrora le relatan y esperanzan.
Las manecillas del tiempo, solo en los relojes marchan. La parte alta
del techo tiene tejas cuando baja, las rampas más inclinadas tienen
rectas tras las curvas y peraltes que se ondulan sobre puntas sustentadas.
del techo tiene tejas cuando baja, las rampas más inclinadas tienen
rectas tras las curvas y peraltes que se ondulan sobre puntas sustentadas.
Y entre puntos de estocadas diminutas, se yerguen erizadas las tórtolas
taciturnas desplumadas. Y entre dos piernas mojadas, se ve de ángulo la
Venus vuelta Musa, acalorada, volar desnuda sobre un balcón de la luna.
taciturnas desplumadas. Y entre dos piernas mojadas, se ve de ángulo la
Venus vuelta Musa, acalorada, volar desnuda sobre un balcón de la luna.
Y en un eclipse estrellada, la madrugada viajera se da un paseo por las
nubes del consuelo; y vuelve a pueblos donde no llevan senderos. Donde
el sol no opaca el cielo y los ruiseñores bohemios se desalteran gimiendo.
nubes del consuelo; y vuelve a pueblos donde no llevan senderos. Donde
el sol no opaca el cielo y los ruiseñores bohemios se desalteran gimiendo.
Donde los versos más bellos se destilan al poniente por la boca de un
tintero, de donde brotan los restos, de las sombras de arcoíris vueltas
cuerpos, que el amanecer reclaman al unisonó y huyendo de los cementerios.
tintero, de donde brotan los restos, de las sombras de arcoíris vueltas
cuerpos, que el amanecer reclaman al unisonó y huyendo de los cementerios.
Alumbrando el firmamento con sus dedos mientras se esparcen
lloviendo sobre un suelo verde intenso. Agitando en vivo al sol bajo
aguaceros; – y gritando con color de sueños nuevos al amanecer del tiempo.
lloviendo sobre un suelo verde intenso. Agitando en vivo al sol bajo
aguaceros; – y gritando con color de sueños nuevos al amanecer del tiempo.
‒ Aduciendo que el recuerdo vaga lejos si se ajusta el pensamiento a un
todo negro; – y al cerebro llegan sombras de argumentos sin destellos…
- Si el pasado al que volvemos, yace enterrado en un hueco sin más huesos.
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