Recuerda ahora muchacha aquella noche en tu casa,
te fui a buscar entre sabanas y entre reflejos de
llamas te encontré ya acalorada. Me recibiste
embriagada del aroma de tu taza que olía a licor de
manzanas, con fresas verdes borrachas. Y al balcón
perdida ingrávida te mostraste cual ventana; y te
desnudaste el alma, abierta a la pared de espalda…
te fui a buscar entre sabanas y entre reflejos de
llamas te encontré ya acalorada. Me recibiste
embriagada del aroma de tu taza que olía a licor de
manzanas, con fresas verdes borrachas. Y al balcón
perdida ingrávida te mostraste cual ventana; y te
desnudaste el alma, abierta a la pared de espalda…
Y leí la página larga de tu musa ya inspirada.
Y bailaste contra mí y sin mi posaste; y fumaste del
jardín de la muralla, e inhalaste la pasión del polvo
en ramas; y ganaste la impresión de disfrutarla. Y
tomaste hasta llenarme y desbordarte; y jugamos a
besarnos bocabajo. Y bajamos y subimos acabando,
recomenzando cada vez que nos besamos. Y no
paramos hasta tarde por tu cuarto que regamos…
jardín de la muralla, e inhalaste la pasión del polvo
en ramas; y ganaste la impresión de disfrutarla. Y
tomaste hasta llenarme y desbordarte; y jugamos a
besarnos bocabajo. Y bajamos y subimos acabando,
recomenzando cada vez que nos besamos. Y no
paramos hasta tarde por tu cuarto que regamos…
Y por el aire una paloma vi volando, tú en flor sin
frenos te extasiaste entre mis brazos. Sobre tus
senos dos botones te brotaron, la voz del cielo calló
en rayos y gritamos; un nos amamos que escuchó
bien claro el barrio, como dos gallos que calados
cantan alto. Y nos lanzamos cobijados bajo dardos;
y nos llamamos frente a frente y ya flechados…
frenos te extasiaste entre mis brazos. Sobre tus
senos dos botones te brotaron, la voz del cielo calló
en rayos y gritamos; un nos amamos que escuchó
bien claro el barrio, como dos gallos que calados
cantan alto. Y nos lanzamos cobijados bajo dardos;
y nos llamamos frente a frente y ya flechados…
Y allí quedamos, en par clavados los brazos.
Tu y yo los gastos, de luna y sol escapados por los
tejados maullando. Tus cabellos enjaulados te liberé
sin peinarlos. ¿Recuerdas ahora muchacha aquella
noche en tu casa cuando te fuiste cantando? En la que
solfeando tocaste el piano y hasta rogaste mi aplauso;
y luego mis dedos callados trajeron rostros distantes y
sonrisas de otros lados. ¡Y me buscaste pensándonos!
tejados maullando. Tus cabellos enjaulados te liberé
sin peinarlos. ¿Recuerdas ahora muchacha aquella
noche en tu casa cuando te fuiste cantando? En la que
solfeando tocaste el piano y hasta rogaste mi aplauso;
y luego mis dedos callados trajeron rostros distantes y
sonrisas de otros lados. ¡Y me buscaste pensándonos!
Y a manos enteras fui de antes a después del ya pasado.
Y gemiste por allá, descalza sobre toallas que mojabas
sulfurando; por la fuente del Edén de tus pecados…
sulfurando; por la fuente del Edén de tus pecados…
Con el salón apagado y una vela en ti alumbrándose.
Tu y yo a solas tras butacas, sin pantalón y sin falda,
mi cuerda por tu guitarra y tu boca abierta ancha
resbalando, abalando la poción de los milagros
implorados. El candor sin diapasón tiene uñas largas,
la pasión y el descontrol todo relajan. Con los labios al
calor se irriga magia, se ensaliva la expresión y esculpen
lagrimas; y se da vida a la ilusión que dormitaba…
mi cuerda por tu guitarra y tu boca abierta ancha
resbalando, abalando la poción de los milagros
implorados. El candor sin diapasón tiene uñas largas,
la pasión y el descontrol todo relajan. Con los labios al
calor se irriga magia, se ensaliva la expresión y esculpen
lagrimas; y se da vida a la ilusión que dormitaba…
Cual masaje a un corazón que ensangrentaba; y hoy
sueña a válvulas infladas, ser la esperanza que te falta.
sueña a válvulas infladas, ser la esperanza que te falta.
Recuerda ahora, muchacha… Y no te vayas.
¡Espera el alba hoy en mi casa y lee mi página!
Picture by Vincent Tessier
Web du dessinateur: http://www.vincenttessierxxc.com
fantastico gran genio poeta!!!
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